POR QUÉ DEBERÍAS ELEJIR TRATAR TU PADECIMIENTO CONMIGO.

El objetivo principal de mi tratamiento es utilizar la alimentación como un medio para el crecimiento y realización de mi paciente tanto en el aspecto físico, como en el emocional y espiritual.
Cualquier desajuste o carencia la transformo en una área de oportunidad para capitalizar las experiencias. La idea es lograr que mi paciente elimine permanentemente la grasa corporal en exceso o bien erradique ese hábito indeseable que tanto le molesta y le perjudica. Que mejore simultáneamente todas las demás áreas de su vida. Enriqueciendo su día a día, a través de una serie de intenciones cotidianas que harán del tratamiento algo único, personal, sencillo y versátil, más que nada divertido y estimulante.
Si acudes a tus citas tu éxito esta garantizado.

jueves, 23 de octubre de 2008

ME SIENTO AGRADECIDA CON DIOS

Si tuvieron la oportunidad de leer el primer artículo de este blog titulado LA MEJOR RAZÓN, pudieron darse cuenta de que hubo momentos en que este trabajo de nutrióloga que elegí me pareció por momentos un tanto insatisfactorio, al grado de estar a punto de desistir en él. Y es que para ser franca en ocasiones el esfuerzo que realizo para apoyar a que mis pacientes tengan éxito no da los frutos tan anhelados. Sin embargo por algún motivo sentí que no era justo desaparecer tantos años de experiencia, días y noches pensando en una fórmula mágica (la cual evidentemente no existe), para que cada persona que acude a verme pueda conseguir la meta que desde un inicio tenía en su mente y en su corazón. Tampoco era justo abandonar a las personas que me dieron el privilegio de su confianza. Esto fue por ahí de Enero, todavía era invierno. Entonces decidí que debía seguir adelante con este proyecto cotidiano que tengo en la mente desde que tenía trece años. Dios me ha multiplicado a partir de ese día las satisfacciones que si bien tuve en muchas ocasiones ahora parecen interminables.
Hoy por hoy, creo que tengo uno de los mejores trabajos que una persona pueda realizar. Lo disfruto, me encanta, es todo un placer recibir a la gente que llega a mi con la esperanza de verse y sentirse cada día mejor. Llego muy temprano por la mañana a mi consultorio y me instalo como quien llega a un hotel porque está de vacaciones. Cuando termina el día regreso a mi casa con el espíritu pleno y con un gusto que no sé cómo decribir (también me canso), el hecho de que sean mucho más los éxitos que los fracasos no significa que en ocasiones el día no resulte agotador, pero se cansa mi cuerpo, mi mente, pero mi espíritu no.
Mi lugar de trabajo es una clínica de primera, es un lugar confortable, cómodo, bonito, bueno.... que les puedo yo decir me encanta. Antes de estar aquí yo tenía junto con mi mamá un centro médico llamado ASPECTO Y SALUD, en Mitras Norte, estuve ahí hasta que mi mamá se enfermó y dejó de consultar hace ya casi ocho años, era bueno estar ahí pero los cambios son necesarios. Ahora si que ni mis chivas tomé, solo lo cerré y busqué un nuevo sitio dónde estar para poder seguir con mi labor. Arturo mi buen amigo, me dio la oportunidad de estar en este espacio tan bello como el que siempre quise tener, fue también él, quien me alentó a continuar y me ofreció su apoyo de manera incondicional, no puedo menos que estarle agradecida por compartir su espacio conmigo. Alguien me dijo: después de 18 años bien merecido te lo tenías. En ocasiones nos ciclamos tanto que no nos damos cuenta de los privilegios y las oportunidades con las que contamos, perdemos de vista todo lo extraordinario de las cosas y las personas que nos rodean, no valoramos lo afortunados que somos hasta que llega alguien y te sacude para que despiertes de ese aletargamiento.
Pues bien le doy gracias a Dios por darme cada día la oportunidad de hacer lo que me gusta hacer, le doy gracias por haberme puesto en el camino: el lugar y las personas que necesité para valorar todo lo que tengo, le doy gracias por enviarme a toda esa gente tan maravillosa que ha engrandecido lo que hago. No puedo creer que con tanta facilidad mis pacientes puedan estar consiguinedo sus metas, le doy gracias a Dios por poner en mi voca las palabras correctas para no defraudar a quienes confían en mi y que además me pagan por ello.
Dios en su infinita sabiduría se manifiesta de las formas más inesperadas. Nuevamente confirmo que quien tiene en la mente una idea, una meta, un proyecto, una razón, tarde o temprano cosechará lo que ha sembrado.
Estoy agradecida con la vida, estoy agradecida con Dios, estoy agradecida con las personas que me apoyan cada día para disponer del tiempo del que gozo para realizar mi trabajo, estoy agradecida por haber tenido una madre que me puso en el camino, pero sobre todo estoy agradecida con mis pacientes, esas personas que me engrandecen como profesionista, esas que me dan la satisfacción de sentir que puedo seguir y continuar un trabajo que solo depende de ellos, puedo mencionar a muchos pero los iré agregando a la lista solo después de preguntarles, si me permiten mencionar el nombre nombre de algunos: Javier, Dany, Celeste, Amauri y muchos más. Gracias por permitirme formar parte de esa transformación que ustedes decidieron tener en sus vidas. Gracias por permitirme compartir la dicha y la felicidad de crecer como personas.
Liliana.

1 comentario:

Celeste dijo...

NO MUJER, GRACIAS A TI!