
Deben saber que durante los 26 años que tengo de atender personas con trastornos de alimentación, nunca antes había sucedido algo similar. En alguna ocasión escuché algo así: "el maestro aparece cuando el alumno está preparado", a mi modo de ver esta es una reflexión muy profunda porque básicamente no depende del maestro sino del alumno. Quiero dejar muy claro que esto es una metáfora. Por ejemplo ni Celeste es mi alumna ni yo soy su maestra, antes yo diría que ha sido al revés. Sucede que en este asunto de bajar de peso están involucradas todas las partes del ser humano. La física, la intelectual, la emocional, la espiritual y si alguna me esta faltando den por hecho que también tiene participación en el proceso. Porque el ser humano no esta dividido, es un todo, es la totalidad. Pues bien....la dieta es un instrumento que se usa para bajar de peso, pero básicamente esta diseñada para que la persona que la sigue tenga una disciplina de alimentación mientras reacomoda una serie de situaciones existenciales y logra identificar lo que su cuerpo necesita en cantidad y en calidad.

El asunto es que cuando alguien se propone cambiar de apariencia y no consigue lograrlo, pasa de ser un deseo a una frustración. La frustración crea una insatisfacción que puede quedar en una resignación o en una dosis de infelicidad permanente. Quienes tienen un ligero sobrepeso y que intentan tener esa figura escultural son en muchas ocasiones tachados de vanidosos, probablemente así sea, pero me pregunto que hay de malo o pecaminoso en aspirar a verse siempre bien, más aún cuando se corre el riesgo de pasar de un ligero sobrepeso a una auténtica obesidad que definitivamente puede desencadenar múltiples problemas de salud.
No sé ustedes pero a mi me ha tocado conocer historias de personas que lograron salir de una adicción tremenda a las drogas y nunca nadie consideró que esto fuera intrascendental o superfluo. La comida es maravillosa, deliciosa y nos la merecemos. Pero puede ser tan dañina como cualquier droga mortal si se convierte en una adicción, que causa insatisfacción, inseguridad, malestar, enfermedad o cualquier cosa negativa que se nos pueda ocurrir. No nos queda la ropa, no podemos subir unas escaleras sin sentir que casi nos da un infarto, nuestras lonjitas no nos permiten agacharnos, abrochar los zapatos y demás, es tanto como caminar día con día con una piedra en el zapato, que si bien no nos mata de inmediato, nos hace la vida insoportable porque en el fondo sabemos que podemos ser mejores pero que no lo logramos, y no porque no sepamos que y cuánto debemos comer, sino porque no podemos hacerlo, porque la raíz del problema no es la simple vanidad sino las razones auténticas por las cuales no podemos ser física e intelectualmente lo que sabemos que podemos ser. Esté es el motivo por el cual este asunto del peso y de no vernos como sabemos que podríamos vernos, resulta ser bastante complicado.
La idea del diario de Celeste surgió debido a que yo les recomiendo a mis pacientes que lleven un reporte diario de cómo se sienten, que comieron, cuando y por qué motivos tuvieron una crisis de glotonería etc. Se los he recomendado a todos con la finalidad de que una vez que hayan bajado una buena cantidad de kilos no olviden cómo se sentían en un inicio, el costo tan alto que tuvieron que pagar por sus logros y que de esta forma traten de conservar ese avance con la importancia que merece, además de que para mi es un instrumento más de apoyo para mi consulta porque me revela puntos importantes para tratar con mi paciente.
Pese a que a todos se los he pedido, casi nadie lo hace. Les da flojera, se les hace innecesario, en fin, que además es una sugerencia de las muchas que yo hago en mi consulta. Sucede que Celeste quiso ser práctica y en lugar de comprarse una libretita, hizo un blog y lo puso en internet, desde un inicio me quedó muy claro cuales eran sus principales objetivos al hacer esto. Primero, quería llevar un reporte que le sirviera para evaluarse a si misma y nunca olvidar. Esta parte es para ella misma. Segundo, quería que yo leyera sus escritos, eso fue excelente porque para cuando iba a su consulta yo ya tenía una idea de como andaba su vida, su ánimo y que tan disciplinada o no había vivido su semana. Tercero, decidió que las personas más cercanas: su esposo, su familia y amigos pudieran leerla para que le dieran el apoyo conveniente y que si alguno de ellos tuviese el mismo problema pues tal vez pudiese ayudarle el proceso de ella para enfrentar el suyo propio. Que les puedo decir, esta fue la forma que Celeste eligió para comprometerse con su tratamiento y si de paso podía ayudar a alguien más, pues que mejor. Sucede que además de haber sido sincera, escribe de una forma muy amena, divertida, fresca y variada. Y estarán de acuerdo conmigo en que quienes entran en su página que no son de la familia, conocidos, amigos o yo, son personas que seguramente padecen el mismo problema que ella vive.
Imaginen cuantos seres humanos andan por ahí con años y años de intentar quitarse todo ese peso, la grasa tan molesta, poder usar la ropa que ellos quieren, y todo lo que ya de sobra sabemos desea alguien que no ha podido ser esbelto. Leen a Celeste y le comparten su vida, su experiencia, su blog pasó de ser un diario personal pero práctico, a un foro de terapia pública o algo así, la verdad no sabría cómo bautizarlo. Imaginen cuanto compromiso fue adquiriendo, porque evidentemente ella que ha pagado las consecuencias de esta enfermedad, sabe lo que alguien más puede estar sufriendo.
La mayoría de los comentarios que ella recibe son positivos y alentadores. Pero hay algunas personas que dejan salir su ira y sus frustraciones y demeritan el esfuerzo y el trabajo que ella realiza. Si su desición fue seguir adelante con este blog, pues bien por ella y bien por los que al leerla podemos aprender algo. Sí, Celeste es una chica brillante, maestra de la universidad, tiene una maestría, es pintora, pero también es un excelente ser humano, positiva y muy chambeadora. Sabe que ser obeso no la denigra como persona, porque ella vale por lo que es no por como se ve, pero también sabe que la obesidad es una enfermedad que se instala en ti y que la puedes aceptar o la puedes rechazar, el problema es que si la rechazas empieza una lucha que no termina hasta que consigues tu meta o vives con esa inconformidad de no haberlo logrado. Y si la aceptas puede quedarse en ti toda la vida y dependiendo de la cantidad de grasa extra que se tenga dependerá también los estragos que realice en el cuerpo con el paso de los años. En nungún momento este asunto de los blogs fue un proyecto de mercadotecnia para enriquecernos, ella vendiendo su historia y haciéndose famosa por una película como alguien lo mencionó y yo llenando de pacientes mi consultorio al grado de no poder darles la calidad de la atención que les doy hasta ahora. Sin embargo yo me pregunto en esta época donde la venta de droga, los secuestros, robos, fraudes, casas de juego etc. les permite a las personas enriquecerse a costa de la desgracia de otros seres humanos, porqué es tan molesto para alguien que una persona pueda ganar dinero, fama o reconocimiento ayudando a otros en su crecimiento. No me parece que eso sea malo, de hecho me parece excelente, es más todos los trabajos lícitos así se manejan. Bueno por hoy terminé. Que tengan un maravilloso día.
Liliana.
1 comentario:
No sé que decirte más que gracias y no te defraudaré ni a ti ni a mi!
un abrazo feliz fin de semana!
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