
Albert Einstein es un personaje que yo, personalmente siempre he admirado mucho. No solo por su inteligencia, sino además porque nunca tuvo limitaciones para descubrir y realizar proyectos intelectuales que verdaderamente, y hay que reconocerlo, no cualquier humano podría. El dijo: "la locura es seguir haciendo lo mismo y esperar resultados diferentes". También mencionó: "hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica; la voluntad. Cuenta una historia que un día estaban dos niños patitando en un lago, que por las bajas temperaturas estaba congelado, uno de ellos pasó por una parte donde la capa de hielo estaba muy delgada y debido al peso quebroce dicha capa, y el niño se undió en la helada agua, el compañerito y amigo al ver esto, se quitó uno de sus patines y golpeó con tal fuerza el hielo, que logró romperlo y rescatar a su amigo de una muerte segura. Al llegar el equipo de rescate, no podían creer que un niño tan pequeño hubiese podido realizar semejante hazaña. Uno de los rescatistas le pregunta al peque: ¿Cómo pudiste hacer esto tu solo?
Cuenta la historia que en ese momento pasaba por ahí un hombre, su nombre Albert Eisntein y al escuchar el cuestionamiento del individuo hacia el niño, le respondió: "es que no había nadie presente, que le dijera que no podía hacerlo".
La vida es así, tenemos que usar la voluntad para lograr ver nuestros sueños hechos realidad, siempre se puede. Alguna vez escuché la siguiente frase: DIOS SIEMPRE QUIERE. Y por supuesto nos apoya, para que de alguna manera podamos conseguir todo lo que deseamos y necesitamos. Debemos pensar, afirmar y decretar que todo es posible. Que no hay nada que anhelemos que no podamos hacer. En uno de los capítulos del libro El Alquimista se menciona, que cuando uno desea algo con todas las fuerzas de su corazón, el universo entero conspira para que consiga lo que tanto anheló. Pido disculpas por aquello de que no mecione yo, literalmente las frases que publico en mis artículos, es que en ocasiones no las recuerdo exactas pero finalmente transmiten el mensaje.
Ahora bien, ¿A qué viene tanto análisis de la voluntad y la relización de sueños y metas?
Bueno a que nada es imposible, a que debemos quitarnos las rejas, bardas y murallas que nos impiden tener, hacer y lograr nuestros objetivos.
Tener una figura esbelta y una imagen saludable, es cuestión de que estemos seguros de que así será. Todo se puede, nada es imposible. Y debemos seguir soñando, debemos visualizarnos con un cuerpo escultural, con una esbeltéz nunca vista, con una salud impresionante y si de paso se puede (que sí se puede), siendo ricos, exitosos y populares, pues que mejor.
No existen límites, DIOS es generoso y sumamente bondadoso; de hecho a diferencia de lo que a mí me enseñaron en mi infancia, ahora que soy adulta, he entendido que lo normal es la abundancia (no de kilos de grasa extra en el cuerpo), lo natural es tener mucho de todo lo bueno, la pobreza es antinatural.
Dios no creó un ser humano sino millones, no nos brindó un solo tipo de flor sino miles, no hizo un árbol sino una cantidad inagotable de variedades.
DIOS SIEMPRE QUIERE, y quiere verte sano y feliz. Desea que apliques tu libertad en tomar las desiciones correctas para que así sea.
Es muy simple solo debes decidite a superar un día a la vez.
Busca... pide ayuda y apoyo.
DIOS está contigo y te dará el valor de que seas lo que siempre haz deseado.
Liliana.
2 comentarios:
Definitivamente concuerdo contigo en que Albert Einstain fue una persona sin limitaciones. Gracias a él ahora contamos con la teoría de la relatividad, el efecto fotoeléctrico, la mecánica cuántica, la física estadística, la bomba atómica entre muchas otras aportaciones que hizo a lo largo de su vida.
Yo como física trato de aplicar las teorías científicas de la misma a la vida diaria y Einstain hacía lo mismo. Cuando propuso la ley de la relatividad lo explicó con un sencillo ejemplo: "Al querer conquistar a una chica, una hora parece un segundo, pero si estás sentado en una estufa caliente, un segundo parecerá una hora. Todo es relativo".
Ahora vamos a cambiarlo y modificarlo un poco a nuestro estilo de vida "Al comer todo lo que se me antoja y todo lo que me gusta, un año parece un día, pero cuando por fin me pongo a dieta, un día pareciera como un año".
He estado tratando de leer todos tus artículos pero me gusta leerlos y volverlos a leer para realmente captar todo el mensaje que desear transmitirle a tus lectores pero una de las cosas que más me ha encantado es cuando dices "El tiempo como quiera pasa". Y es verdad. Los días, aunque se sientan como años, nunca tendrán más de 24 horas (de hecho, 23 horas, 56 minutos y 04 segundos) y si multiplicas ese número de horas por los días, semanas, meses que te tomará llegar a tu peso ideal, será la misma cantidad de tiempo que pasará aunque decidas no seguir la dieta y no luchar por tus metas.
He sido una perdedora por ya casi 10 años, ya que siempre desistí en mi lucha por llegar a mi peso ideal, y si alguna vez llegué, seguí siendo igual de perdedora porque no me supe mantener.
A partir de hoy, está en nuestras manos decidir si queremos que el tiempo siga pasando sin que hagamos nada por nosotros mismos o si por fin nos vamos a levantar y gritar "YA NO", "YA NO quiero ser la gorda en mi trabajo", "YA NO quiero seguir comprando ropa cada vez más grande", "YA NO quiero inventar excusas para no salir porque nada me queda", "YA NO voy a ser infeliz". YA NO.
Ya es tiempo de cambiar y si no están seguros por dónde empezar, les recomiendo ir con Liliana a una primera cita para que aclare todas sus dudas. Y si no están en Monterrey, busquen a alguien más, pero asegúrense de que sea alguien que realmente los quiere ayudar y que no sólo te pesa y te mide, sino que realmente se preocupa por que tu salud emocional mejore junto con tu salud física al controlar la alimentación.
Saludos a todos y Gracias Liliana por siempre estar dispuesta a ayudar. Te prometo que me voy a "graduar" de esta "universidad" que me enseña no sólo a bajar de peso, sino a mejorar mi estilo de vida y aún más importante, a escuchar las carencias (o abundancias) de mi cuerpo.
Hola Liliana, me compartieron tu página y bueno... que te digo... me fascino tu forma de motivarnos... y creo firmemente en lo que comentas... lo he vivido... si quiero... lo puedo lograr.
Un abrazo y bendiciones.
Sylvia Herrera (sylvia@itesm.mx)
Publicar un comentario